En medio de los cruces entre el Gobierno, y los dichos del Presidente del Concejo Pablo Fiore, se dejó en claro que el proceso de convocatoria a asamblea en Barrio Malvinas es totalmente «legal» y compete autoridad al Ejecutivo poder ejercer la potestad de llamar a asamblea en un distrito barrial.
Aunque todavía, desde el Gobierno no se vertieron declaraciones públicas, ya hay una idea formada sobre lo que pueda suceder el miércoles en la reunión de vecinos. «Si no hay una lista salida del consenso, es decir que miembros de ambas listas, por ahora son dos las que aspiran a conducir los destinos de la vecinal, se confirmará el llamado a elecciones a sobre cerrado, y con urna en un tiempo perentorio. Tiempo que permita días para las impugnaciones que puedan aparecer por vecinos o miembros de una lista para con otros, la conformación de los padrones de votantes, conformación de las boletas donde figuren todos los miembros de las mismas listas electorales, todos los participes en la elección deben tener asentado su domicilio en DNI en el barrio, o poseer una propiedad acreditada en esa vecinal, dejando en claro el proceso para que queden todos los caminos allanados y con campaña proselitista por parte de los candidatos».
Además desde el Ejecutivo aclararon que «lo manifestado en este medio por parte del Concejal Fiore no atiende ningun impedimento al que el Ejecutivo deba estar atado. Primero porque esa revisión de esa comisión elegida con pocos vecinos presentes, que incumplió varios puntos del reglamento como no haberla notificado al Municipio, no convocar masivamente a los vecinos en medios radiales, escritos y televisivos, ya está fuera de cualquier defensa. Igualmente si Fiore y el PJ avanzarán en la vuelta de las sesiones ordinarias de aprobarla, el Ejecutivo tiene todas las facultades de vetarla, cosa que tiene decidido hacer».