Se asoman semanas de enormes desafíos. Todas tendrán impacto directo en el bolsillo de «todos». En la politica le toman el pulso a la cuestión de esta problemática que pasa poco a poco a ser «puntera» en la preocupación de todos quienes pueden expresarlo en una encuesta.
Claro, que por el lado de nuestra provincia, la inseguridad asoma como el otro ítem relevante para solucionar en un corto plazo. Cuando uno hace referencia a estos temas, no es más ni menos, que contextualizar situación, y desde ahí empezar a analizar que pasa con los políticos.
Alguien manifestaba en estos días, y es probable que lo haya hecho pensando allá por el 2001, «por aquel año era dificil ser radical, y ahora, con dos decadas consumidas, es dificl ser peronista«. Una apreciación no menor, pero todo tiene contextos.
La economía manda, no hay dudas, todo lo que podamos escribir o analizar lo deberemos atar a la situación de los bolsillos. La UCR provincial le pidió a Perotti reestablecer el dialogo inmediato con los sindicatos que han venido parando la provincia semana tras semana. Le ha sido dificil al gobernador establecer agenda con los bombos sonando en las calles. La que viene será una semana clave para darle punto final al conflicto. No cayó simpático en los sindicatos que el llamando haya sido recien para el comienzo de septiembre, esto enfureció a los gremios, y echó más leña a un conflicto demasiado largo.
Lo que pasa en la provincia, no escapa a lo que pasa en Nación. No se puede hablar de agenda con miles de personas afuera de la casa de gobierno pidiendo soluciones a sus bolsillos. Son tiempos dificiles para el Peronismo, en Nación y provincia. A los politicos los desespera que a un año de las venideras PASO haya conflictividad con los sectores que nuclean a miles de personas. Esto retrasa cualquier anuncio que se quiera poner como importante o relevante. Lo de la segmentación de las tarifas de servicios fue desprolijo, y lo que si se sabe es que muchos pagaran tarifa plana. Es mentira que la gran mayoria consuma menos de 400 kv y eso se llama tarifazo. El estado nacional busca ahorrar, y empezar a acomodar las cuentas. Lo hace en un contexto inflacionario terrible, y que un aumento más, hará que los indices de precios se disparen otra vez. Se acodaron tarde de acomodar cifras, o afinar la punta del lápiz. Esto se demoró, porque en otros tiempos, se decia que esto atentaba contra las masas, ahora se hace, y se cambia ese discurso.
En este contexto, los politicos asoman y pretenden estar en la cuestión de gestión. A veces para la foto, y otros haciendo lo que siempre hicieron.
El senador Michlig estuvo recorriendo obras hace pocos días atrás, y fue contundente con la provincia, «hay que sacar la plata del plazo fijo, y atender con equidad a los municipios y comunas de toda la provincia» manifestó el legislador que hace rato viene cruzando al gobierno de Santa Fe por la distribución de obras.
El diputado nacional Mirabella tambien paso por Ceres, y se esforzó para repasar lo que se está haciendo, y certificar que será uno de los nombres para suceder a Perotti. Mirabella no estuvo solo, vino acompañado por Carolina Morel, Luisina Giovannini, y algunos funcionarios de las terceras líneas que responden a la coordinadora de políticas públicas.
Todos los presentes coincidieron en que el recorrido en este contexto actual no es tan sencillo. Hay que salir a defender políticas que parecen intangibles en la realidad de la gente.
Mientras tanto, el senador nacional Dionisio Scarpin visitó a la Intendente de la ciudad de Ceres. Entre ambos charlaron de una situación dificil del ámbito nacional. A Dupouy le preocupan, que ante tantos movimientos de politicos pasandose de un cargo para otro, se demoran obras claves que ha gestionado ella misma ante los distintos ministerios de nación. Le pidió a Scarpin ser uno de los nexos para acelerar esas obras tan esperadas. Nación tiene cero presencia en Ceres. Y ya no hay pandemia, la gran excusa que han usado muchos para justificar «ausencias».
Reapareció esta semana el concejal Busquets, quien acompañado por el diputado provincial Oscar Martinez pudo llegar hasta el ministro Katopodis, un ministro que salvó la ropa tras la zaranda que activaron con la asunción de Massa. Este sector del peronismo ceresino claramente tiene otra brújula, y alejada de Perotti y sus alfiles. No les interesa en Siempre por Ceres sentarse a buscar unidades con mandato ni de Sassia, ni de Giovannini o ahora de Morel. Todavia ponen las elecciones del año pasado en la mesa de las negociaciones, y están cerrados con eso.
De estas distancias en algunas localidades de los peronistas, Morel manifestó a este medio en Ceres, que es real que entre los «compañeros» hay diferencias, pero no se puede ganar una elección si se va dividido. A las pruebas se remitió hablando de la contundencia de los números de Michlig y sus candidatos en las últimas elecciones. Morel será una de las armadoras por mandato de Sassia en el departamento, nos quedó esa impresión, y ella no lo negó.
Son tiempos dificiles para todos. Hay aspiraciones políticas individuales que pretenden lanzarse ahora, y no esperar a lo que venga en el corto o mediano plazo. Los desespera que no haya situaciones positivas que le permitan anunciar sus intenciones. Tal vez la política de hoy tenga otros tiempos, o los mismos de siempre, cuesta definirlo. Lo que está cada vez más claro es que quienes buscan coaliciones y sumar fuerzas haciendo hincapié en los consensos y no en las disidencias, la cosa viene más aliviada. Los que tienen «tormentas» internas la tienen muy dificil, mucho más dificil de lo que hubiesen pretendido suceda en septiembre, el mes de la primavera, pero tambien el mes de buscar nichos e instalarse definitivamente de un solo lugar de la grieta. Los bolsillos tambien están de un solo lugar de la grieta, y ese será el factor primario que se volcará a las urnas el año que viene, inevitablemente, asi será la cosa.
Martin Farias