Silvia ya no reclamará más nada. No podrá escribir en su cuenta de Facebook sobre sus miedos. Silvia ya no está, la mataron. Otro femicidio. Nadie escuchó a Silvia. Solo leyeron sus post y las cosas siguieron como si nada pasara. Nadie pudo preguntarle a Silvia que le pasaba, como estaba, como vivía, y el porque de sus temores. La Justicia estableció medidas, claramente insuficientes para detener un final que podría haber sido evitable. Otro femicidio conmueve a Hersilia, la región, la provincia y el pais. Vendrá una etapa larga de audiencias, testimonios, y la comunidad de Hersilia clamará por justicia.

Claro que ese clamor tendrá un resultado, si es que algún día sabremos toda la verdad. Silvia Quinteros ya no está, la mataron, le quitaron su mamá a tres niños, le sacaron una amiga a su núcleo de amistades. Ella ya no va a poder confesar. hay bronca e indignación en la gente, porque todos presentimos que se pudo haber evitado un final trágico. Esperemos que la Justicia esté a la altura de las circunstancias, por la memoria de Silvia, y la de sus hijos.