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Editorial: Un gobierno «cómodo» con los guiones y arrebatos de su oposición

La cancha política local empezó a preparar el terreno. El comunicado del peronismo liderado por el ex Intendente, dijo lo suyo, y se mostró en las antípodas de la gestión, incluso del otro «peronismo».
El debate por las condiciones actuales, y el impacto de las medidas que tendrán su eco para el resto del 2020, jugarán un rol clave.
En el gobierno, la motorización de la obra pública, y decisiones férreas de sentenciar cuestiones relacionadas a la conducta, le dieron otro espaldarazo.
En la oposición, que juega un rol «frío» en el Concejo, miran con recelo el avance de la gestión de gobierno.
Tal vez por ese accionar demasiado tibio en las filas del legislativo, desde el Justicialismo más «díscolo» salieron a mostrar las primeras armas. Ese será el «lev motiv» de la campaña de ese peronismo más acérrimo. En el escrito, hay una crítica a los casos de dengue, coronavirus, decisiones de gestión, que han sido bien ponderadas por la comunidad, pero que esa fracción opositora intenta «denostar».
Hay que mostrarse «opuesto» a lo que se hace. Ese parecería ser el mandato. «No hay lugar para débiles o tibios» sería el otro aviso.
No hubo declaraciones sobre el post comunicado. Si se analizó en las otras esferas políticas. «Hay un destiempo que puede ser crucial» reafirmaron desde los propios allegados al partido que gobernó durante 16 años la ciudad.
El otro «Justicialismo» directamente prefirió evaluarlo, desmenuzarlo, y no encontró demasiadas coincidencias con lo que advierte ese comunicado.
«No refleja nuestra estrategia para encarar desde la oposición» se escuchó decir dentro de las filas de ese sector que responde a la ex concejal Giovaninni.
En el gobierno lo tomaron al pasar, «ese será el tipo de oposición que buscarán acentuar» dijo uno de los allegados a la mesa más chica del comando gubernamental.
«Nos ayuda una oposición que remarque lo que ellos ven mal, cuando lo hicieron peor, o directamente no hicieron nada» afirmó otro de los dirigentes cercanos al poder local.
No hay dudas que el peronimso que aun simpatiza con el ex Intendente, salió a intentar ganar en las redes sociales, pero después hubo poco impacto. Eso también habla del momento, o tal vez, de las formas que se usaron para el cuestionamiento sobre lo que se hizo.
«Más que criticas hay que aportar soluciones, el momento está muy dificil» dijo un dirigente institucional cuando se le preguntó que opinaba de la actualidad política ceresina.
Ese tal vez sea el «horizonte» a venir. Y hay que analizarlo puntillosamente. Hay cuestionamientos lógicos que aparecerán en los próximos meses, «el que hace, está supeditado a los cuestionamientos». Lo sabe el gobierno. En la semana hubo dos casos curiosos que la oposición más «acérrima» intentó explotar. La decisión de la Intendente de echar a un miembro de la policía municipal, y de la poda del arbolado público. No lo consiguieron. Incluso esos dos casos ejercieron un efecto «bumerang» que dolió en filas de la gestión anterior. «Tienen el respaldo de una porción de la sociedad que los apoya en las redes sociales como trolls» se animaron a cuestionar desde un sector del peronismo, que ve como las criticas se diluyen rápido, y terminan imperando las loas al gobierno.
En ese sector «díscolo» de la oposición también cuestionan fuertemente el accionar de los concejales que deben ejercer oposición en el Concejo. Avizoran que no hay argumentos sólidos para cuestionar las decisiones de la Intendente y el gabinete.
Cajonearon el presupuesto, con argumentos que no hieren al poder. Incluso la decisión de Rafael, de acompañar el tratamiento, ha dejado heridas en el bloque del Justicialismo. «No es momento de oponernos por oponernos» le habría confesado el edil a sus allegados.
Su participación en la apertura de sobres para la compra de cemento, demostró a las claras que hay fisuras en el sector más numeroso de la oposición. Rafael ha decidió mostrarse más conciliador con el gobierno, y su voto en las futuras sesiones puede ser clave, y obligue al presidente del cuerpo a tener que usar su voto doble «para cuestionar los proyectos del poder». Eso los expondrá ante la sociedad, y la estrategia que diseña el gobierno apunta a esa exposición constante. Pablo Fiore probablemente analice esa situación personal, y si servirá quedar siempre a boca de jarro con voto doble, más aún si tiene aspiraciones a encabezar una lista a concejales el año que viene, y retener su banca.
La cancha empieza a marcarse, y está muy claro en que arco estará cada uno.

MARTIN FARIAS