En este momento estás viendo Ceres: A 20 días de nochebuena, ¿habrá propuestas bailables después del brindis?

Ceres: A 20 días de nochebuena, ¿habrá propuestas bailables después del brindis?

  • Autor de la entrada:
  • Categoría de la entrada:Generales

Hace algunas semanas, los propietarios de discotecas de la ciudad, y de otras localidades del departamento, han iniciado gestiones en sus respectivos municipios para buscar alternativas a los encuentros clandestinos que se producirán tras el tradicional brindis de navidad y año nuevo, en caso que no haya posibilidades de proponer espacios para bailables al aire libre.

Tal vez la resolución del gobernador de Córdoba, de prohibir bailables y recitales hasta abril del 2021, sea el primer golpe duro para los propietarios de lugares de esparcimiento y la tradicional noche santafesina.

En Ceres, se han iniciado conversaciones, se evaluaron protocolos, intercambiaron ideas con miembros del gobierno, pero todo está en verse. El primer dato en contra a esta idea, es que «desde provincia no hay ningún decreto que permita eventos masivos, o con mucho público ni en espacios cerrados, ni tampoco abiertos». En el gobierno local, deducen que ir por afuera de eso, sería grave. Aunque los funcionarios de la gestión saben que «las fiestas clandestinas se producen  más asiduamente» no evaluan por el momento ir en contra de las restricciones que aun imperan en toda la bota provincial.

Los propietarios de los boliches, y de lugares bailables comenzaron a cruzar ideas, con la posibilidad de proponer aperturas de espacios bailables, pero «al aire libre y en los playones de los clubes ceresinos con división de gastos y ganancias para ambas partes». Concretamente, ya está descartado de plano que las discotecas como las conocemos, abran sus puertas. Pero la opción son los playones de los clubes, o algún espacio al aire libre que permita el «distanciamiento». Pero esto tambien corre con muchas desventajas, y la más contundente es «no se permiten más de 100 personas en ningún lugar del mundo», y mucho menos propuestas bailables que lleven a mujeres y hombres a juntarse a bailar de la mano como se hacia en la vieja normalidad.

Otro item en observación, es la capacidad de personas a ingresar que proponen cada uno, y además, si es rentable montar una estructura, generar gastos para controlar dentro y fuera de esos lugares, que se respeten protocolos, con menos de 200 bailarines. Una de las personas que está en tratativas avisó a este sitio de noticias que «voluntad hay de todas las partes, pero si no se permite desde la provincia, hacerlos solos será muy dificil».

En el gobierno local también hay una mirada conservadora al respecto, «se entiende que ellos quieran trabajar, que hay muchas fiestas clandestinas, pero el costo político de que se permita dentro de la ciudad, cuando no esta habilitado por un decreto en la provincia, podría ser altísimo» señaló uno de los funcionarios a los que les llegó la propuesta.

A 20 días de la primera gran celebración, no hay nada resuelto, ni mucho menos autorizado. Por el momento, y tal vez incluso en las mismas fiestas, juntarse en un espacio a bailar será considerado una fiesta «clandestina» y la policia podrá ejercer el rol de dar por concluida la misma e imputar a los organizadores. Los patios de las viviendas tal vez sean el mejor refugio para que la celebración de navidad y año nuevo, se extienda con música propia, y con el núcleo de personas que han celebrado la misma en familia.