Las expectativas generadas, y el hartante año electoral, dan paso a lo esperado. Soplan vientos de cambio. Esos mismos vientos traerán reformas, y nuevas miradas. Es lógico, y por ende a estas alturas necesarios.
Las principales expectativas están generadas en la postura del nuevo presidente argentino Javier Milei. Un hombre que junto a su compañera Victoia Villarruel se sentaron como diputados nacionales en 2021, y 2 años despues se convirtieron en presidente y vice a la nación. Habrá que revisar la historia, si esto pasó alguna vez en nuestro pais, pero tambien si pasó en algun otro lugar del universo.
Esa irrupción como los nuevos fenómenos libertarios los llevaron a ser los elegidos para cambiar esta situación dificil, desordenada, que atraviesa la Argentina. La tarea no será fácil. Habrá que tomar un tiempo prudencial, se habla de primeros seis meses duros para acostumbrar a todos que hay un gobierno que no quiere repetir lo mismo, y que busca otras condiciones. Es cierto que tuvo que rodearse de ministros y asesores que son parte de la politica argentina del pasado. Pero como los tiempos cambian, esos funcionarios tambien estarán atados al rigor de que lo que se hizo hace 30 años atrás, hoy no daria resultado. Se los verá andar. Lo importante es que el apoyo de la gente está, eso no es un dato menor, ese es el mejor aval para encarar reformas duras, si las hubiese que tomar.
Y en este sentido están oyendose voces de todos los gobernadores. Cuando decimos todos, son todos, sin distinción de banderas partidarias. Habrá que ajustar los torniquetes del gasto político y exagerado. Se acaban los tiempos de gastar desmezuradamente a costa de que el estado nacional cubra las perdidas. Habra que alinear prioridades. La asitencia social será importante, y un área a la que todos los mandatarios deberán ponerle más recursos.
En esa sintonia estarán intendentes, y presidentes comunales. Los gastos exhorbitantes de la campaña terminaron. Los números rojos de la politica, ahora se compensarán en plazos. Habrá que ajustar billeteras, y empezar a andar despacito y por la orilla.
En esta sintonia la Intendente de Ceres se reunió con el futuro ministro de hacienda Pablo Olivares. Le reclamó todo lo que tiene aprobado pero jamás le giraron desde la administración Perotti. Pidió todo, pero le solicitaron ir paso a paso. Es que Dupouy quedó muy relegada en materia de obras, y de fondos, con otras municipalidades de la provincia que cobraron todo. Perotti castigó duro a Ceres. Incluso la mandataria quiere que se le incluya el Instituto Superior del Profesorado en el presupuesto 2024, una obra a la que considera necesaria para su proyecto de polo educativo, y que la gestión anterior se lo «carpeteó» y hasta incluso negaron que haya proyectos presentados para tal fin. Habrá que ver si puede incluirse dentro de las obras programadas por la gestión Pullaro para el 2024, en un presupuesto de más de 4 billones y medio. Caminos de la Ruralidad tiene todo aprobado, pero jamás se ejecutó. Finalmente aquella promesa del ministro Costamagna de hacer la obra antes que se vaya de la provincia, no podrá cumplirla. Esa obra está apuntada por la Intendente y se lo contó a Olivares.
Con lo justo en materia económica, el Gobierno de la Ciudad ha podido cumplir con el pago de haberes a los trabajadores municipales. Falta el aguinaldo, y para eso Dupouy espera poder percibir parte de la deuda contraida por la gestión anterior. En el área de hacienda saben que a momentos economicos dificiles, los vecinos que venían atrasados en el pago de tributos volverán a atrasarse, que muchos convenios de moratoria estarán dificiles de seguir siendo cumplidos. Es la dinamica del ajuste. Cuando todos hacen el ajuste, es lógico, que una familia tambien lo haga. Los innovadores vientos de cambio, empiezan a soplar, y entender el mensaje de las primeras ráfagas será clave.
MARTIN FARIAS