La Comisión de Asuntos Laborales de la Camara de Diputados de la provincia analizó la situación que atraviesa la provincia en términos de empleo, en un contexto de inflación y recesión. Como invitados, el ministro de Trabajo, Roald Báscolo, y el secretario del área, Julio Genessini, describieron a los legisladores el cuadro de situación que atraviesa Santa Fe y que ya comienza a generar las primeras señalas de alarma: incertidumbre en el sector empresarial, suspensiones y escasa o nula generación de nuevos puestos de trabajo. El presidente de la Comisión, Joaquín Blanco (PS), admitió que se está frente a un escenario preocupante: «Vamos hacia una recesión generalizada», advirtió.
– ¿Cuál es el panorama de la provincia en términos laborales teniendo en cuenta la actual coyuntural económica y social?
– Están comenzando a aparecer cuestiones que son muy preocupantes; uno lo que percibe y transmiten los propios funcionarios es que hay una enorme incertidumbre dentro del sector empresarial. Y cuando hay incertidumbre, hay parálisis. No se están generando nuevos puestos de trabajo en la provincia y ya empiezan a generarse suspensiones, reducción de horas extras o adelanto de vacaciones. En lo formal, en cuanto a los trabajadores registrados, no se están detectando conflictos a gran escala todavía. Pero sí se está poniendo la lupa sobre uno de los sectores que primero siente los efectos de la recesión que es el de la construcción. Por eso, se han constituido mesas empresariales, con la UOCRA y el Ministerio de Trabajo, para mediar ante la parálisis de diferentes obras. Algunas de ellas son obras públicas nacionales. Hay una situación de alarma. El Ministerio (de Trabajo) se está preparando para una situación de conflictividad social y laboral; y desde la Comisión de Asuntos Laborales estaremos monitoreando todo y acompañando al Ministerio para acercar las partes y procurar creativamente que no se afecten los puestos de trabajo.
Hay temor también por lo que pueda pasar con las Pymes?
Obviamente que eso depende del sector. Los primeros indicadores complejos tienen que ver con el comercio; hay datos ya de enero en rubros, por ejemplo de vestimenta, que comparado con enero del año 2023, han descendido en promedio entre 15 y 25% el volumen de sus ventas. Con lo cual es abrupto el deterioro de la capacidad de consumo en enero y esto obviamente que va a tener una repercusión en materia no solamente de ingresos, sino también en materia laboral, de impuestos… Y esto termina afectando a las finanzas públicas. En febrero vamos a tener números nuevos, pero la verdad que el panorama es muy grave e insisto: todavía no hay una crisis generalizada. Tenemos sectores como la construcción y el comercio que son los primeros que están dando señales de fuerte alarma. Evidentemente, vamos hacia una recesión generalizada.
¿Se abordó el tema previsional?
– Sí, y hemos solicitado una reunión con el Secretario de Seguridad Provisional Jorge , puesto que el área depende también del Ministerio de Trabajo. Muchos miembros de la Comisión estaban preocupados por declaraciones que él había formulado a El Litoral a principios de enero… Bueno, el ministro aclaró que no estaba en los planes del gobierno ninguna transferencia de la Caja de Jubilaciones ni ninguna privatización como había circulado por redes sociales. Pero sí alertó sobre la enorme deuda que tiene ANSES con la provincia por más de 400 mil millones de pesos. Imagínense lo que eso significa para la provincia. Se habló de la dificultad que están teniendo todos los gobiernos provinciales que no han transferido sus cajas para lograr que Anses cumpla con la remisión de partidas prometidas. La situación de la Caja es preocupante; es deficitaria y obviamente que amerita mucha seriedad y mucha responsabilidad por parte de los funcionarios para, justamente, hacerla sustentable sostenible y que no se perjudiquen sus beneficiarios.
Con información de El Litoral