Han sido días dificiles, con muchas declaraciones cruzadas, presiones, observaciones, y de hasta personajes que siguen delirando que esto es un «invento». La democracia que vivimos realmente nos da chances claras de opinar y hacer lo que nos plazca.- Tanto es asi que hay delirantes que aun sostienen que todo esto es un «circo» fogoneado por los medios de comunicación. y que nadie puede arrogarse autoridad para permitirles hacer lo que quieran. Que pena que todavia estemos aceptando este tipo de idioteces, cuando el mundo está buscando medidas para prevenir miles de muertes por Covid.
Pero vayamos a lo nuestro, lo que origina cruces y cruces de opiniones, y que se agrieta cada vez más.
Primero: La enfermedad existe, 126 casos en 140 dias desde el primer caso en Ceres.Algunos se complicaron más que otros, gente que necesito de respiradores y otros no. Hubo fallecidos, y los que murieron lo hicieron con Covid. No es dato, es información concreta.
Segundo: Las autoridades nucleadas en una Junta toman decisiones. Las de anoche ya no se asemejan a la de los comienzos quedó muy claro. Pero, hay que entender el contexto en el que se toman las decisiones. Todos sabemos que para parar la circulación del virus, hay que confinar a la gente. Esa formula es archi conocida. Pero, en que situación estamos para apelar a que esa es la solución que hoy necesitamos.
Tercero: Bajar una curva ascendente de casos significa menos circulación de personas. Pero eso no se da por restringir horarios, o cerrar por 10 días. Se da solo con la concientización ciudadana. Y ahi fallamos, pero fallamos feo. Por eso los contagios que se han triplicado en las ultimas semanas.
Cuarto: ¿Como explicar lo varias veces explicado?. Habra que hacerlo una y otra vez, hasta que aprendamos la lección. El uso obligatorio de barbijo social, la distancia entre personas de dos metros, la frecuencia constante del lavado de manos, el alcohol en gel o el liquido, las mesas en bares separadas, con pocos ocupantes, menos festicholas con más de 10 personas, son una solución muy efectiva, ¿por que no las aplicamos?
¿Por una cuestión de rebeldia, hartazgo, o porque nos arrogamos que nadie puede limitarnos en nuestros derechos individuales?. Que mal que estamos por pensar que lo que se quiere hacer es violar derechos.
Sería más fácil para autoridades politicas, sanitarias, liberar todo, y que la vida sea como lo fue hasta marzo de este año. Como lo fue hasta ese dia 14, el último día de la «vieja normalidad». Y entendamos, es una normalidad que no podremos volver a tener. No porfiemos, ni siquiera esperemos que la vacuna nos venga a salvar. Las costumbres cambiaron, y tal vez hayan cambiado para siempre. Que no podamos tomar un porron de a pico entre varios, o matear o tomar tereres con el mismo mate, tal vez no exista más, pero empecemos a aplicarlo, a estudiarlo como haciamos para la pruebas de matemáticas, porque es algo que deberemos aprender y nunca más olvidar. Pero eso no es culpa o ocurrencia de los politicos, o de los médicos, es lo que se encontró para pelearle a una pandemia. Si alguien encuentra otra solucion, que la aporte, que llame a las autoridades pertinentes y la cuente.
Si algo logró el Coronavirus es dividirnos entre la vida y la muerte, y la plata o el precipicio, nos puso en juego los elementos fundamentales por las que vivimos como humanos. Sin salud no hay plata que valga, pero sin plata no podemos comer, que es vital para seguir viviendo. Entonces, para conseguir que estas dos partes esenciales de nuestra vida diaria puedan encontrarse es clave, «el uso de barbijo, la distancia social, no hacer fiestas o participar de eventos multitudinarias», y no hay excusas, no importa lo que haga el otro, hay que hacerlo uno primero, y después procurar que los otros lo entiendan. Si no conseguimos seguir nuestra vida con el virus a las vueltas, estaremos repitiendo de grado porque nunca aprendimos la lección. No podemos ser tan ignorantes, que con medidas efectivas, no las usemos. ¿Que mas hay que explicar a estas alturas?, con 8 meses de pandemia todo debería ser solo una cuestión de costumbre. Nadie se va a enojar si no queres ir a su casa a una comilona, ni tampoco dejaras de ser mejor amigo, si no tomas del mismo mate o de la misma botella. No tengas verguenza de ponerte un barbijo, o de tomar distancia de otra persona, aunque la conozcas desde la escuela primaria. Lamentablemente el virus vino a pegarnos en el contacto social, y habra que aceptarlo. A quien culparemos por eso, al chino que se comio un murcielago, a los politicos del nuevo orden mundial, la cosa ya está entre nosotros y eso no va a cambiar solo porque encontremos a quien propagó el Covid 19, solo lo podemos cambiar desde la conciencia ciudadana, la unica arma que más castiga al coronavirus.