Javier Milei aleccionó esta mañana durante una hora y media a los diputados libertarios sobre los pasos -todos positivos, desde su mirada- que tomó durante los primeros 70 días de su gobierno; les adelantó que su discurso del viernes por la apertura de sesiones legislativas será una profundización del repaso de la herencia kirchnerista, con números concretos basados en informes de las distintas áreas del Estado. Y sobre todo, enfatizó en el apoyo de la opinión pública a su propia gestión, con números de diversas encuestas que repasó con detalle. “Las expectativas de mejora económica subieron del 20 al 42 por ciento”, les dijo, según relataron varios de los presentes.
En total fueron 37 diputados nacionales. Casi todos los miembros del bloque, excepto la ex conductora de TV, Marcela Pagano, que se encuentra molesta con la cúpula y se alejó de la primera plana que supo tener durante la campaña. El presidente de la Cámara, Martín Menem; el titular del bloque de LLA, Oscar Zago; y diputadas como Jimena Villaverde, Lilia Lemoine, Juliana Santillán y “Bertie” Benegas Lynch llegaron temprano a la Casa Rosada. Eran las 9.50 cuando empezaron a traspasar los ingresos de la sede nacional, aunque la reunión estaba prevista para las 10.30.
El cónclave empezó puntual, en el salón Sur del primer piso, y se prolongó hasta pasadas las 12. Milei fue el único orador, y las pocas intervenciones de sus invitados fueron para hacer preguntas. El Presidente se extendió largamente sobre las medidas económicas tomadas durante los -casi- tres meses desde que asumió el mando (las calificó a todas como positivas); y se mostró entusiasmado sobre las perspectivas de la economía para el segundo semestre. “Nos dijo que se vienen dos meses duros, en marzo y abril, la inflación está bajando y después se viene el repunte”, relató un diputado a la salida, desde la explanada de Balcarce 24.
Los presentes abordaron además la tensión política originada en torno al enfrentamiento entre la Casa Rosada y los gobernadores. Dijo que no va a ceder ante los reclamos por los recortes de fondos, continuará el ajuste y la reducción de partidas y lanzó una frase que repercutió entre los presentes: “Si es necesario, los voy a hacer llorar”.
El Presidente repasó además la lista de los “traidores”, es decir, los nombres de los legisladores que se habían comprometido a acompañar la fallida Ley Ómnibus y en el inicio de la discusión en particular terminaron rechazando reformas que para el Gobierno eran determinantes. Pese a ello, volvió a plantear una frase que ya esbozó varias veces en público. “Lo único que dijo es lo de siempre, que no importa el color político, que están abiertas las puertas para todos los que quieran ayudar”, contaron.
“Nos dijo que este es el camino correcto, ahora es momento para empujar el trabajo que está haciendo el Ejecutivo”, contó un miembro de la bancada. Y varios agregaron que el primer mandatario deslizó que el viernes “va a sorprender” con su discurso en el inédito horario nocturno, aunque no dio más detalles sobre cuál sería la novedad.