En una reunión vía zoom, referentes de los principales sectores de la Unión Cívica Radical de la provincia analizaron los resultados de las elecciones presidenciales del domingo, y comenzaron a fijar la postura que el partido llevará a la reunión del Comité nacional que se realizará este miércoles en Buenos Aires, de cara al balotaje. «Lo más criterioso pareciera ser dejar en libertad de acción a los electores y militantes», dijo el diputado provincial Julián Galdeano. El legislador participó del encuentro virtual así como el gobernador electo, Maximiliano Pullaro, Felipe Michlig, José Corral, Gustavo Puccini, Carlos Fascendini, Santiago Mascheroni, Dionisio Scarpín, Isabel «Chuchi» Molina, Victoria Tejeda, Leandro González y Franco Bartolacci, entre otros.
En diálogo con El Litoral, Galdeano hizo su lectura de los resultados, habló del futuro de Juntos por el Cambio, de la fragmentación permanente que vino atravesando el espacio, y de la postura que predomina de cara al balotaje.
– ¿Qué análisis hace de los resultados?
– Teníamos encuestas que daban indicios de lo que se dio pero no deja de sorprender; primero, porque a veces se pierde la capacidad de análisis y compresión de por qué los argentinos terminan acompañando en gran parte a una gestión que viene con los niveles de desaguisados, desajustes y falta de proyecto como el gobierno nacional. Pero también, hay un déficit en la posibilidad de definir de parte de la oposición; y cada vez que el peronismo se une y la oposición se divide, los resultados son similares.
– ¿Qué escenario ven a partir de ahora?¿Juntos por el Cambio va camino a la fragmentación y ruptura?
El proceso en la oposición fue de fragmentación permanente tanto dentro del radicalismo como en Juntos por el Cambio, con las características que sabemos que tuvieron las primarias. Por lo tanto, esto no es una novedad; lo raro sería la unión de la oposición en este contexto. El primer desafío es que el radicalismo recupere algún nivel de centralidad política y eso significa tener una estrategia común; no es sencillo administrar las posiciones divergentes que ya empiezan a surgir y algunas con un nivel de rigidez, que atenta contra la construcción de una síntesis. Después hay que unificar posturas dentro de Juntos por el Cambio. Y también hay que intentar confluir con otros espacios en la provincia de Santa Fe, en el marco de Unidos; y eso no va a ser sencillo porque hay muchos que ya tienen posiciones y acercamientos de un lado y del otro. En definitiva, no habiendo demasiado entusiasmo hacia ninguna de las dos opciones que quedaron para el balotaje, vamos a estar ante una situación de difícil resolución.
Sobre esa base, ¿podría el radicalismo en Santa Fe dejar en libertad de acción a militantes y simpatizantes?
– Eso surge como lo más criterioso dado el contexto en el que estamos. Si nosotros analizamos que es posible que sectores de nuestro electorado vayan a acompañar a Milei, otros que voten en blanco, otros que no vayan a votar o anulen el voto decepcionados con la situación, y otros que voten a Massa pensando que Milei es un salto al vacío, ante ese electorado y con nuestra dirigencia con miradas tan distintas sobre lo que hay que hacer, no va a ser sencillo construir una posición hacia un lado o hacia el otro.
– ¿Es decir que la postura que llevarían a la reunión del miércoles a nivel nacional es la de que en Santa Fe se deja al electorado en libertad de acción?
– Sería eso; sería que no se le exija a nadie y que se permita todo. Se trataría de que quienes quieran ir en un sentido tengan la posibilidad de hacerlo, sabiendo que no se trata de una elección, sino de una opción; hay que optar, no hay que elegir. Por otra parte, todo lo que digamos o hagamos va a ser usado en nuestra contra por alguno de los sectores que no nos votaron o que forman parte de nuestra propia estructura política.
– ¿Esa libertad de acción deja las manos libres a cualquier dirigente, en este caso de Santa Fe, para pronunciarse por un candidato o el otro?
– Entiendo que va a haber libertad en ese sentido; hay que ver cómo se expresan. Hay que esperar que baje un poco la marea. Independientemente de eso, tampoco hay que mezclar las posiciones institucionales que deban ser debatidas y fijadas; con las personales de cada uno. Nosotros sí tenemos como desafío en Santa Fe, además del que tiene Juntos por el Cambio a nivel nacional de intentar sobrevivir como coalición y ver cómo surfea esta situación, tenemos el desafío de conservar lo que es Unidos como expresión política y futuro gobierno. Y eso va a tener que contemplar que posiblemente algunas de las fuerzas de Unidos vayan en un sentido y otras, en otro. Eso hay que respetarlo.
Fuente de la información El Litoral
