La Empresa Provincial de la Energía (EPE) procederá con la compra de 40.000 medidores inteligentes. Se trata de la tecnología que permitirá la «telemedición» a distancia de los consumos de electricidad de los usuarios.
Permitirá realizar diversas maniobras remotas, como por ejemplo toma de lectura para la facturación, y hasta cortes y reconexiones del servicio.
Por otro lado, el usuario podrá controlar el consumo en tiempo real, a través de la oficina virtual que dispone la compañía.
La decisión de avanzar con el programa llega luego de las correcciones técnicas que se hicieron con la prueba piloto que incluyó la colocación de 10.000 equipos en todo el territorio provincial.
El martes se procederá a la apertura de sobres con un presupuesto de 320 millones de pesos. De los 40.000 medidores, cerca de 12.000 serán para la ciudad de Santa Fe.
Jorge Tarchini, gerente ejecutivo de Desarrollo Organizacional de la EPE, indicó que se trata «de un proyecto a largo plazo que consiste en la incorporación paulatina de todos los usuarios de la empresa (casi 1.400.000) a un sistema de telemedición que permita tomar a distancia la lectura de medidores, como así también reconexiones y cortes del servicio por facturas impagas».
El programa se divide en etapas, precisó: «La primera comenzó en 2020, con un análisis de la situación de mercado y es cuando establecimos los pasos a seguir. En 2021 se realizó la compra de 10.000 equipos que se utilizaron como prueba piloto, en Santa Fe, Rosario y Rafaela».
Finalizados los ajustes técnicos de la prueba piloto, la empresa provincial de la energía procederá a comprar 40.000 dispositivos, de los cuales 12.480 serán para la ciudad de Santa Fe (cerca de 20.000 en Rosario y 10.000 en Rafaela).
Ahora, la compañía se prepara para lanzar la tercera etapa: «Es lo que definimos como «situación de régimen» para comenzar con el reemplazo de medidores. La semana que viene, el martes 17, abrimos la licitación para la compra de estos 40.000 equipos».
«Si tenemos ofertas convenientes vamos a tener la entrega en los próximos 60, 90 días y después directamente empezar a destinarlos a la instalación en las tres grandes ciudades: Santa Fe, Rosario y Rafaela», detalló
Tarchini explicó que «con la prueba piloto ya ajustada y resuelta la cuestión técnica, el trabajo ahora es automático: una vez que se conecta el medidor, empieza a reportar».
Y describió algunos de los beneficios: «Por un lado el envío de la información en tiempo real de la medición, de forma automática, lo que aceitará la interrelación con el sistema comercial. Y también para el usuario que empieza a tener información, puede tener acceso a un montón de información que con la actual tecnología no lo puede hacer».
Sobre este último punto, explicó: «Una de las cosas positivas que dejó la pandemia fue poder darle mayores funcionalidades a la oficina virtual. Más allá de los trámites comerciales que se venían llevando a cabo, nos obligó a incrementar las funciones de la oficina virtual. Ya tenemos desarrollado, para aquellos usuarios que vayamos incorporando a esta experiencia digital, de poder ver el consumo; no solamente la última medición que tienen registrada, sino la de los últimos meses, la potencia de energía; si fuera el caso de un gran usuario que contrata potencia podría ver la diferencia entre la potencia que tiene contratada y la que registró en los últimos períodos»
Advirtió que en principio se va a trabajar en un grupo reducido de usuarios: «Vamos a elegir en esta primera etapa a usuarios testigos que puedan acceder a esta información para después sí comenzar a masificarla a quienes se van incorporando».
Aclaró que la tanda de 40.000 medidores inteligentes se colocarán en viviendas tradicionales, en edificios, comercios e industrias que estén en el radio urbano de las ciudades antes mencionadas (Santa Fe, Rafaela y Rosario)
Sobre el costo del equipamiento, precisó: «Históricamente el precio de un medidor de esa tecnología costaba 100 dólares. Hoy, bajaron al 50 por ciento aproximadamente, con lo cual; si bien estamos transitando una situación compleja en general, especialmente con la provisión de equipamiento, tenemos expectativas de que las ofertas estén en ese orden. Por la cantidad que vamos a comprar (40.000) nos permite pensar que podrían costar en el orden 50 o 60 dólares por equipo».
Informó que las empresas que operan en la provincia de Buenos Aires, que tienen el doble de usuarios que la EPE, tienen alrededor de 40.000 medidores inteligentes colocados, lo que posiciona a la provincia en un buen lugar. En el caso de Córdoba, que lleva un año trabajando en la materia, ya tiene 30.000 usuarios conectados y plantea una nueva incorporación de equipos.