Con un dólar paralelo disparado por obra y gracia del descreimiento de la sociedad en el gobierno nacional en particular, y la política en general, la política santafesina eligió preservarse, echando por tierra los tremendistas pronósticos de los periodistas – entre los que nos incluimos – sobre un “súper jueves” casi escandaloso de Asamblea Legislativa. Pero “la procesión va por dentro”.
La sangre no llegó al río. Pero sigue corriendo.
“Las instituciones deben seguir funcionando; hicimos un gran esfuerzo para corregir los desatinos del Poder Ejecutivo, y votamos algunos pliegos”, resumió el vicepresidente del bloque de diputados Neo-Evolución Fabián Bastía, cuyo bloque decidió votar en contra de casi todos los pliegos para Jueces Comunitarios de las Pequeñas Causas, que no obstante ello salieron aprobados, salvo tres y un cuarto que quedó en suspenso por decisión judicial.
El líder del grupo Maximiliano Pullaro, justificó que “Evolución votó en contra de la mayoría de los pliegos porque se violó el criterio de objetividad y transparencia”
A todo eso, un veteado mosaico político de diputados utilizó la herramienta de la abstención, y naturalmente el voto positivo, para mostrar intencionalidades políticas, y un piso circunstancial de aparentes mayorías en esa cromática Cámara Baja, sobremanera de cara al año electoral y también estratégica renovación de autoridades en ese hemiciclo, que alberga a futuros contendientes por la gobernación; directa e indirectamente.
En abril del año que viene habrá que elegir autoridades de la Cámara de Diputados, cuyo presidente Pablo Farías reemplazó a Miguel Lifschitz con la aquiescencia de todo el arco político que hasta ahora lo siguió ratificando.
Los conciliábulos por la renovación de autoridades de la Cámara de Diputados se darán simultáneamente con el cierre de listas (seguramente en mayo si Omar Perotti decidiese convocar a elecciones en setiembre); y no será un tema menor.
¿Habría “frente de frentes” (FPCyS y Juntos por el Cambio) para ese entonces?. Hoy todo indica que no. Es más; tal como aventuramos en estas páginas, hasta sería probable que el residual político del FPCyS – sin la UCR- arme una “tercera posición” integrada por el PS, CREO, GEN, PDP y otros voluntarios que quisieran sumarse (¿incluidos radicales “sueltos”?) ¿con Clara García como única candidata a gobernadora y listas de diputados que le tributen?.
El lord mayor rosarino Pablo Javkin, si bien nunca se subió abiertamente, tampoco se bajó de sus aspiraciones gubernamentales. Nada que no pueda resolver el diálogo, las encuestas; o eventualmente las PASO.
El peronismo volvió a su liturgia: “todos unidos triunfaremos”
Casi no hubo fisuras en el peronismo en la Asamblea Legislativa, conducida por la experimentada muñeca política de un veterano en esas lides: Raúl Gramajo, presidente de la Comisión de Acuerdos, y seguramente precandidato para intentar renovar su banca en el Departamento 9 de Julio por octava vez.
El “bloque de Traferri” acompañó a sus pares en las votaciones, y hasta se abstuvo en el polémico pliego para fiscal titular de su verdugo: Matías Ederi. Lo cual no significa que el año que viene necesariamente todos apoyen a Omar Perotti, cuando éste encabece la lista de diputados provinciales de su prohijado precandidato a gobernador.
Armando Traferri no se opuso al pliego de Matías Ederi, porque aguarda que más temprano que tarde, y en virtud del avance de la Causa Sain, el fiscal Ederi quede bajo la lupa de la Comisión de Acuerdos (ya que quedó sin efecto la conformación de una Comisión Evaluadora de la conducta de los fiscales) por haber falseado pruebas y engañar a jueces para conseguir allanamientos y escuchas “legales” contra tres personas – que impugnaron su pliego – a las cuales, curiosa e insólitamente el propio MPA les dio la calidad de “víctimas”, como al propio Traferri.
“Mientras tanto, al fiscal Matías Ederi le asiste el principio de inocencia”, pontificó Traferri en el recinto para justificar su abstención.
Sain no pasará desapercibido en vísperas de un año electoral.
Marcelo Sain y siete de sus colaboradores mientras ejercía su función como ministro de seguridad, este martes 29 deberán declarar en audiencias imputativas, dentro del marco de la causa iniciada hace casi un año, en la que se investiga un presunto espionaje ilegal y “perfilamiento” contra centenares de ciudadanos de esta Provincia.
“El martes 29 va a empezar otra historia en esta Provincia para empezar a recuperar esa calidad institucional que alguna vez nos destacó”, vociferó Armando Traferri durante el transcurso de la Asamblea Legislativa, persuadido que Sain y sus colaboradores terminarán siendo juzgados, “y saldrán a la luz las patas políticas y judiciales que lob ayudaron a cometer semejantes tropelías”, suele confesar ante sus interlocutores.
Todo en un año electoral.