(Por Dario Schueri).- El “Caso Insfran”, emulo del Castro-chavismo criollo insólitamente avalado por la dirigencia del PJ nacional, utilizando al extremo como vil excusa la pandemia para establecer cuasi campos de concentración – encima con gente sana – y la detención arbitraria e inconstitucional de dos concejalas radicales que denunciaron el hecho, sin el más mínimo reproche por parte del gobierno nacional, es un explosivo modelo que tiende a expandirse peligrosamente entre funcionarios reconvertidos en apasionados “comisarios epidemiológicos”.
En un recomendable artículo escrito en Perfil, la psicóloga Solana Ini junto con el médico Cristian Duré concluye que “a partir del 2020, la causa que prevalece en el imaginario colectivo como principal factor desencadenante de una enfermedad infecciosa es la circulación de personas o el contacto con el otro”; y prosigue: “este cambio en nuestra percepción es resultado de un aprendizaje intenso que hemos recibido a lo largo de 2020, que nos ha llevado a consolidar esta asociación mental. Antes le temíamos al frío, ahora le tememos a la gente”.
El terrorismo psicológico al que es sometido la humanidad desde el inicio de la pandemia, en nuestros pagos se potenciará con la necesidad de que la población se vacune con la – quizás injustamente- sospechada Sputnik V, única vacuna que el gobierno compró en medio de grandes controversias, no solo científicas.
El virus también va a la escuela.
En el plano institucional, el SARS-COv-2 es ahora conveniente utilizado por gremialistas docentes, autoridades y políticos para disputar otra batalla, porque no también preelectoral: el inicio del ciclo lectivo 2021.
Santa Fe ya decidió que el 17 de febrero arranquen – de manera presencial- los grupos prioritarios (7º grado de Primaria, 5º de Secundaria, 6º de Técnica) en un período de intensificación pedagógica, hasta el 10 de marzo, “complementando y asegurando las competencias básicas del nivel”, señaló la Ministra de Educación Adriana Cantero. Luego el 15 de marzo comenzarán los restantes cursos de manera “bimodal”: una mixtura entre presencialidad y virtualidad.
Frentes políticos para armar.
Señalábamos hace una semana que el “frente de frentes” con el que se quiere ensanchar el actual FPCyS atraviesa aguas turbulentas, y el casi cotidiano devenir de los hechos nos dan la razón. Ahora los radicales de los sectores “Libres” y NEO” decidieron apurarle los tiempos para que su goleador Miguel Lifschitz firme contrato con el FPCyS, seguramente preocupados por el decidido avance del PRO – en sus dos vertientes- y sus aliados radicales en Juntos por el Cambio, en pos de convencer a mas radicales para engrosar su equipo.
En un punzante documento, estas corrientes radicales dicen que van a “insistir con la figura de Lifschitz como el mejor candidato de este nuevo frente transversal y amplio que va a recuperar el gobierno de la provincia en 2023, realizando “todos los esfuerzos de diálogo y coordinación para construir una alternativa real al kirchnerismo en la provincia”; pero en el párrafo siguiente ponen los puntos: “de no aceptar, Lifschitz, la propuesta de la UCR, los dirigentes entienden que se deberá continuar en la búsqueda de un candidato adecuado al armado de un frente amplio opositor al kirchnerismo, donde el radicalismo sea protagonista”. En términos futboleros: si no firmas vos, vamos por otro nueve de área.
El presidente de la Cámara de Diputados se abstuvo de formular declaraciones sobre el ultimátum radical. El que habló fue el Secretario Adjunto del Partido Socialista Rubén Galassi, quien cree – al igual que Pablo Javkin nos dijera hace 15 días- que por ir detrás de algo nuevo, se pierda la dimensión y el valor real de lo que se tiene; Galassi entiende que hay que “consolidar y relanzar el FPCyS por el cual llegamos cada uno de nosotros en 25 años de construcción”, la vez que propone “hablar serenamente. Apurarse no ayuda. Lo más sólido se construye con paciencia y laboriosidad”, pontificó.
Derecha para todos los paladares
Mientras tanto, “la derecha” quiere aprovechar el viento de cola y arma espacios; como por ejemplo Republicanos Unidos Santa Fe que, con cierta base en Capital Federal, está gestando un armado en Santa Fe entre los sectores Mejorar, Recrear y Uni2 Santa Fe, cuya Junta Promotora para inscribir el Partido en la justicia federal preside el casildense productor agropecuario Jorge Isern, ex PRO.
Por su parte también en Rosario, distintas fuerzas políticas y referentes de movimientos y espacios de centro derecha se reunieron para firmar un documento e iniciar las conversaciones de cara a las elecciones de 2021. Entre los firmantes y convocante se encuentra la Diputada provincial del espacio Somos Vida Santa Fe Betina Florito, quien sostiene que “través del diálogo se deben buscar puntos de encuentro para hacer frente a la lógica de la confrontación instalada por el kirchnerismo”. Todos amparados por UNITE.
A su vez, el dirigente de la UCeDe Gonzalo de Souza está armando el espacio de Espert y Milei en la Provincia, bajo el nombre Avanza Libertad.
A todo esto, un dato no menor invadió el firmamento político esta semana que pasó: el Presidente Alberto Fernández (contradiciendo su palabra por enésima vez) agregó para el período de extraordinarias del Congreso la supresión de las PASO. Un gambito solo para no desairar a los Gobernadores norteños que se lo pidieron; el Presidente sabe que Cristina no quiere.
Bastaría imaginar en Santa Fe por ejemplo, un escenario sin PASO: sería un pandemónium de propuestas – y boletas – del cual seguramente podría sacar provecho el peronismo, siempre y cuando vaya unido. O quien cuente con el candidato más reconocido: por nada el radicalismo frentista desespera por la figura de Miguel Lifschitz; mientras el PRO tienta nuevamente a Miguel del Sel, Carlos Reutemann y hasta la mismísima Amalia Granata.
Todo ello enmarcado en un clima de vaporosa incertidumbre política y económica, que trae aparejado un inquietante malestar social.