La expresión universal “nueva normalidad” que para la psicóloga e investigadora Solana Ini es una deformación (mal) intencionada del sustantivo “anormalidad”, en la República Argentina desde el 20 de marzo del año pasado cambió nuestras vidas de tantas maneras como habitantes somos. En el mundo comenzó un poco antes y sigue ocurriendo con las nuevas oleadas y mutaciones del virus. Deberá aceptar nuestra profesional amiga que efectivamente estamos ante una consentida mundialmente “nueva normalidad”, que surge de entre las cenizas aún humeantes de la anormalidad que generó la pandemia.
Argentina y la utilización totalitaria de la pandemia.
En nuestro país la pandemia y su sanitaria “cuarentena más larga del mundo” – jamás vivida por alguien con vida – liberó los “enanos fascistas” de más de un gobernante, que dieron rienda sueltas a sus utopías cuasi dictatoriales escudados en insólitos “protocolos sanitarios”, que más bien se parecían a bandos militares en épocas de guerra.
San Luis, Santiago del Estero, Formosa fueron algunos de los ejemplos más fulgurantes de consentidas (por el Poder Ejecutivo Nacional y la Justicia) experiencias totalitarias de fronteras internas, cuya exposición más atroz la sigue ofreciendo Formosa, cuyo Gobernador Gildo Insfrán con sus actitudes despóticas exponen vergonzosamente a una fracción del peronismo que para “no hacerle el juego a la derecha” (ergo, Macri) lo auspician, cayendo en la execrable falta de respeto a los vapuleados partidaria e ideológicamente “Derechos Humanos” de los formoseños, con personajes increíbles como el periodista Pablo Duggan, quien sugiere que las 80 madres embarazadas escondidas en el monte para que literalmente no les secuestren a sus hijos (como en “aquellas épocas oscuras”) fueron “plantadas” por TN; u otros que de forma indigna y perversa suponen que se visibiliza intencionalmente a Formosa para “tapar el contrabando de soja a Paraguay que Gildo evitó”, como si en todo este tiempo esos camiones no hubieran pasado por territorio formoseño (y Chaqueño).
Mientras tanto en la bota santafesina…
El Gobernador Omar Perotti fue de los primeros en flexibilizar con protocolos únicos armados en los ministerios de la Producción, Trabajo y Salud, las actividades fabriles no esenciales allá por junio del 2020, y un poco más adelante el comercio. Hoy literalmente “todo el mundo” trabaja (menos los salones de fiestas y sus servicios anexos y locales bailables, según apunta la FECECO).
El tema es la vacunación, que con sus idas y vueltas, y algún que otro yerro (tuvieron que echar al director del hospital de Reconquista por permitir un “vacunatorio VIP”) y denuncias de discriminaciones por parte de senadores propios y de la oposición, está encaminado. Si hay confusiones, son fruto de cierta desorientación nacional.
Vecinales: ¿vía de escape a las rigideces superiores?
El dilema que a esta altura le resulta inquietante al peronismo, y al “no peronismo” es la rigidez cuasi marcial de los comandos superiores, básicamente nacionales, que dificultan los armados locales y sus intrínsecas realidades.
En el peronismo, el severo ordenamiento que impone el Instituto Patria (Cristina Fernández) y su brazo ejecutor La Cámpora choca con el rossismo, el massismo, Evita, peronismo ortodoxo y otras vertientes, a lo que se agrega la cáustica relación del Poder Ejecutivo provincial con los referentes naturales, los senadores.
La misma situación de rigor se advierte en Juntos por el Cambio, donde la titular del PRO Patricia Bullrich adoctrinó hace un par de semanas a la tropa provincial para que asuman protagonismos y liderazgos; y lo hizo en esta capital, cabecera de una Provincia donde existe una “tercera vía” que gobernó durante doce años: el FPCyS, al que pertenece el 95 % de la estructura dirigencial radical.
De allí que para anudar acuerdos locales desacoplándose de las férreas estructuras nacional y provincial, unos y otros inscriben en la Secretaría Electoral a razón de un partido distrital (vecinal) por día.
UPCN ayudó a Sonia Alesso.
La aceptación del aumento salarial del 35% por parte de UPCN y el pedido de acortar los tramos a pagarlo, le dio a Sonia Alesso titular de AMSAFE, a quien las bases rechazaron la propuesta, la posibilidad de acoplarse y llamar a nueva votación si la idea prosperase. Ahora bien, si UPCN puso esa condición para aceptar la propuesta, es porque seguramente algunas conversaciones en tal sentido hubieron con el Poder Ejecutivo.
Desde el gobierno, asombrados también por la votación de los docentes rechazando la propuesta –aunque AMSAFE les había pedido también un acortamiento de los plazos de pago – adoptaron una posición inflexible: es esto o nada.
Habrá que ver si con UPCN hacen lo mismo.
Una buena noticia para Perotti viene desde San Luis.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación le fijó a San Luis el criterio de actualización para determinar el monto actual de la deuda por los montos detraídos ilegalmente de la coparticipación para el ANSES
y la forma de pagarla.
Santa Fe, está en idéntica situación con un monto histórico a diciembre del 2015 de 23 mil millones de pesos que, tomando este criterio de la Corte ascendería hoy día a 101.700 millones de pesos.
Si bien es cierto que el expediente del caso Santa Fe sigue en la Corte, pero si el gobierno de Santa Fe y el Gobierno Nacional coinciden en la voluntad de pagar la deuda ¿con qué sentido esperarían?.
“Unos 13.600 millones de pesos del pago de esa deuda es para los municipios y comunas santafesinos”, señala en su cuenta de twitter el analista económico Pablo Olivares, por lo cual inferimos que el Gobernador Omar Perotti instruirá a su Ministro de Economía Walter Agosto para comenzar inmediatamente las negociaciones al respecto.
Nos quedó en el tintero la intención del gobierno provincial de extender el mandato de las comisiones comunales vía Ley, cuando el arco propio y opositor señala que debería ser mediante una reforma constitucional que, para disgusto de la Casa Gris impulsó el diputado peronista Luis Rubeo; la idea del diputado radical Julián Galdeano de que el Estado indemnice a las víctimas por la inseguridad. Y la posición del radical Mario Barletta de ser candidato dentro del “nuevo frente” como alternativa al kirchnerismo.