Señalábamos hace apenas 48 horas en estas páginas que Miguel Lifschitz y Omar Perotti actúan como dos habilidosos jugadores de naipes. Se observan, se recelan, orejean las cartas, miden cada jugada Por razones humanas y de insoslayable institucionalidad, dejamos de lado el otro aspecto de un juego de naipes: esperar a que el rival – que no lo son naturalmente – se equivoque en la jugada.
Tanto Perotti como su delfín Roberto Mirabella lo castigaron duro al Gobernador, acusándolo de incumplidor de la palabra empeñada. Lifschitz se mantuvo como un lord inglés y jamás les respondió en el mismo tono. Pero les respondió, como suelen hacer los políticos, parabólicamente.
Fue este lunes luego de la reunión de gabinete, cuando en conferencia de prensa el Gobernador le hizo saber a Perotti que estaba al aguardo -“respetando los tiempos del Gobernador electo”, aclaro- del encuentro de los futuros ministros de Perotti con los suyos para ir escudriñando aspectos de cada uno de los ministerios; a tal punto, señaló, que todos sus ministros ya tienen precisas órdenes de dejar todo lo que tengan agendado para atender a los enviados de Perotti. Lectura subliminal: si no los envía en tiempo y forma, después que no reprochen nada.
De paso, aprovechó para recordar que mantuvo dos reuniones “de carácter reservado a pedido de Omar”, con el Gobernador electo; y que enviará el presupuesto 2020 a las Cámaras conminado precisamente, por la Legislatura. Ese es uno de los temas que molestó sobremanera a Perotti, quien le recrimina no haber cumplido con la palabra (empeñada en esas reuniones reservadas) de no enviarlo.
La UOCRA está enojada “con la transición”
A todo esto, la Unión Obrera de la Construcción – UOCRA – junto con las delegaciones de Santa Fe y Rosario de la Cámara Argentina de la Construcción, convocaron a la prensa para hacer notar que en los últimos meses se produjeron unas 3000 cesantías como consecuencia de la “ralentización” de la obra pública santafesina.
El titular de la Cámara Argentina de la Construcción, filial Santa fe Renato Franzoni hizo notar que la obra pública “fue un puntal de la gestión de Lifschitz”, a tal punto que mientras en el país crecía el número de desocupados, en Santa Fe la obra pública sostenía los índices de empleo, pero reconoció que en los últimos meses hubo un marcado detenimiento del ritmo de obras, y no se licitaron nuevas.
Fue allí cuando el titular de la UOCRA nacional Carlos Vergara le reprochó a Miguel Lifschitz que haya tomado esas medidas (no licitar obras nuevas y ralentizar el ritmo de las actuales) en virtud de la transición: «los trabajadores no tenemos nada que ver con la transición; Lifschitz siempre cumplió con nosotros, ahora debe cumplir con los compromisos hasta el último día de su mandato, y si no tiene más plata, que lo diga. A los compañeros despedidos no les importa la transición”, espetó.
Vergara señaló que con Omar Perotti “hablaré cuando asuma; hoy el responsable es Miguel Lifschitz”.
Gabinete develado.
El Diario El Litoral publicó lo que sería la grilla de futuros ministros del gabinete de Omar Perotti. La mayoría de los mencionados circulaban en los mentideros políticos, pero nadie se hacía cargo de blanquearlos. Hasta que lo hizo el vespertino santafesino.
Según pudo saber La Opinión, el eje central de esa nómina ya viene trabajando desde hace por lo menos dos meses; no fue el Gobernador electo, como sugieren algunos, quien los filtró. Y existirían errores en la misma.
Omar Perotti aún se tomaría un tiempo antes de oficializarlos.