La mujer de 32 años se enfrentó al dilema de tener que pagar hasta 16 mil pesos por su hisopado para coronavirus y el de su pareja, para poder tener a su hijo en el sanatorio en el que tenía previsto parir y acceder al derecho de ser acompañada por quien ella quiera durante el parto. Y aunque lo hiciera, nadie le aseguraba que iban a poder estar juntos en ese momento, porque nadie sabía si iba a darse un parto natural o cesárea, donde le anticiparon que sí o sí iba a tener que estar sola.

En medio de la pandemia, organizaciones de doulas denuncian incumplimiento de la Ley de Parto Respetado en instituciones privadas.

Embarazada y en medio de la angustia, la ansiedad y la revolución hormonal que generan uno de los momentos más vulnerables en los que puede estar una mujer, Carolina pudo tomar una decisión. Hizo una interconsulta y tuvo la suerte de dar con otro profesional y otra institución de la ciudad donde se cumplen los protocolos sanitarios dispuestos a nivel Nacional y Provincial en el marco de la pandemia, pero a su vez también con su derecho a un parto humanizado.

Como Carolina, muchas mujeres embarazadas se encontraron con esta situación inoportuna. No todas pueden tomar su misma decisión y aceptan las medidas impuestas por los lugares de salud en medio de la pandemia.

Y aunque ahora el Ministerio de Salud ratificó que “no resulta recomendable” realizar los hisopados (RT-PCR) en embarazadas asintomáticas como control o estudio complementario para partos o cesáreas, las instituciones privadas siguen firmes en que van a continuar aplicando su protocolo interno.

Las denuncias

Pero muchas llegaron con esta preocupación a la agrupación Doulas de Santa Fe que desde finales de abril comenzó a visibilizar y denunciar la vulneración de los derechos de las personas gestantes y sus bebés en busca de respuesta y soluciones. “A mediados de abril nos encontramos con que primero se comenzó a no dejar ingresar a los acompañantes a sala de parto y ni al quirófano, siendo que tenemos una ley que establece que la mujer tiene que estar acompañada por alguien de su elección -algo que antes en muchos lugares tampoco se cumplía en los casos de cesáreas-. A esto se sumó la exigencia de realización de los hisopados -para covid- tanto para las gestantes como para los acompañantes como condición para permitirles el ingreso solo en parto y a cargo de ellos. Hoy ronda los $6.100 y los $8.000 y la mayoría de las obras sociales no lo cubren. Incluso les dicen que si dan positivo tienen que ir a parir al sistema público”, expuso a Aire Digital María Belén Baragiola, abogada e integrante de la agrupación.

Las doulas son quienes acompañan, instruyen y ayudan a las personas gestantes durante el embarazo, el parto y los cuidados al recién nacido. Desde su mirada advierten que esta situación, más allá de no tener un sustento sanitario ni legal y cercenar los derechos de las gestantes, generan discriminación, porque solo pueden acceder al hisopado quienes puedan pagarlo. Pero también denuncian que puede retrasar la atención del parto o ponerle una fecha al mismo porque el hisopado tiene una validez de 72 horas (como reconoce la Provincia al pedir el hisopado negativo a quienes ingresan a la provincia desde zonas de circulación del virus) y hasta limitan la vida privada de la paciente porque le imponen una cuarentena obligatoria posterior a su realización de 14 días.

“Hay leyes que nos amparan y ningún protocolo puede ir contra ellas. Hoy en esta pandemia que estamos viviendo no puede ser que sea la excusa para ir más allá”, sentenció la referente.

Pedidos

Estas denuncian llegaron a la Defensoría del Pueblo y a diferentes ámbitos de gobiernos involucrados y solo una institución privada de la ciudad continuó manteniendo esta postura. Pero en los últimos días, con el incremento de casos en la ciudad, comenzaron a surgir denuncias de pacientes de otros sanatorios y clínicas.

Marcela Calcaterra, directora General de Asistencia Técnica Ambiental del organismo, confirmó esta nueva situación y recordó que hoy hay “cuatro denuncias por casos particulares por los que se informó a la Dirección de Legal y Técnica de Salud” por lo que “se pidió intervención y que se vele por el cumplimiento de sus derechos porque hay muchos detalles de cuidado en la Ley de Parto Humanizado”.

Destacó que el 1° de julio enviaron un oficio a la ministra de Salud Sonia Martorano para que aclare en qué situaciones se requiere o no el hisopado. “Nos parece que por ser la autoridad sanitaria deben llevar claridad a la población y a cada efector”, dijo Calcaterra.

En la ciudad de Santa Fe, el Concejo Municipal también recibió los reclamos y se manifestó a favor del proyecto presentado por la concejala Laura Mondino (Santa Fe Puede Más, Frente Progresista) para conocer si hospitales y sanatorios cumplen con los protocolos que protegen el parto respetado en el marco de la pandemia. El proyecto solicitó al Ejecutivo municipal que realice también gestiones para que el Ministerio de Salud de la provincia brinde información sobre los protocolos vigentes.

Finalmente esa respuesta desde la cartera sanitaria llegó el último viernes. Y aunque fue celebrada por la agrupación denunciante, parece que no es suficiente para las entidades privadas que mantienen su postura.

Salud confirma que no es exigible

Con fecha 13 de agosto y bajo la firma del Secretario de Salud de la provincia, Jorge Prieto, el Ministerio de Salud emitió la disposición N°001 en la que establece “que la realización de RT-PCR por hisopado nasofaríngeo no resulta recomendable en embarazadas asintomáticas; ya sea en forma previa a controles rutinarios o para estudios complementarios, partos o cesáreas, como así tampoco en personas que requieran de una cirugía programada”. Y aclara que sí deben cumplirse “en todos los casos con las medidas de utilización de equipos de protección personal y bioseguridad indicadas en el protocolo provincial vigente”.

Días antes de esto Prieto confirmó a Aire Digital que ningún protocolo Nacional o Provincial recomienda el hisopado previo para coronavirus a personas embarazadas, o que requieran de una cirugía, que no presenten síntomas compatibles con la enfermedad, ni criterios clínicos epidemiológicos. Pero aclaró que los protocolos son una “sugerencia”, tal como lo es la disposición que fue emitida desde el ministerio el pasado viernes. Sostuvo que el Gobierno no puede “prohibir nada, ni decir que no, ni obligar” a las instituciones a cambiar sus protocolos internos. Incluso cuando el Gobierno reconoce que esta práctica, que fue “verificada” por ellos, “podría demorar la atención de pacientes no sospechosos de Covid-19″.

Como alternativa, Prieto indicó que acordaron con obras sociales la cobertura de estos hisopados, entre las que se encuentra en principio el Instituto Autárquico Provincial de Obra Social (Iapos).

El Ministerio de Salud aclaró que no está indicado el hisopado en embarazadas sin síntomas.

Protocolo interno

A pesar de esto, el presidente de la Asociación de Sanatorios, Clínicas y Sociedades de Asistencia Médica de Santa Fe, Carlos Abraham, confirmó que hoy por “prevención” en los sanatorios que nuclean se pide el hisopado para coronavirus a embarazadas que cursan la semana 37 de gestación, ya sea para parto natural o cesárea, y que esto también se pide en menores de 14 años que requieran de intervención quirúrgica. La explicación es que ambas poblaciones de pacientes no pueden realizarse por razones de seguridad la tomografía de tórax que en el marco de la pandemia realizan a todas las personas que ingresan a quirófano para descartar que puedan estar cursando la nueva enfermedad.

La Asociación de Clínicas y Sanatorios mantienen su postura y señalan que es una medida de bioseguridad.

“Es un protocolo interno de bioseguridad. El ingreso de un paciente positivo no detectado implica la salida laboral de agentes de salud. Es una medida de mitigación de riesgo de contagio de personal de salud que hoy es esencial”, concluyó Abraham. Y adelantó que en los próximos días, y por solicitud de los propios sanatorios, reclamarán a obras sociales ampliar la cobertura del estudio molecular para diagnóstico de coronavirus para pre-quirúrgicos también de cirugía mayor y procedimientos generadores de aerosoles, que favorecen el contagio.

Lo que dice la ley

Es importante recordar que tanto la negativa del acompañamiento como el pedido de hisopado son violatorios de los derechos de las personas gestantes estipulados en la ley nacional 25.929 (2004), que estipula que toda mujer, en relación con el embarazo, tiene derecho «a no ser sometida a ningún examen o intervención cuyo propósito sea de investigación, salvo consentimiento manifestado por escrito bajo protocolo aprobado por el Comité de Bioética» (sic). Y más adelante establece que puede «estar acompañada, por una persona de su confianza y elección durante el trabajo de parto, parto y postparto».

Estas disposiciones se refuerzan con la ley N° 26.485 (2009) de protección integral a las mujeres que contempla la violencia obstétrica y la define como “aquella que ejerce el personal de salud sobre el cuerpo y los procesos reproductivos de las mujeres, expresada en un trato deshumanizado, un abuso de medicalización y patologización de los procesos naturales, de conformidad con la Ley 25.929”.

Lo que indican los protocolos

Las recomendaciones para la atención de embarazadas y recién nacidos en contexto de pandemia (actualizado al 20 de julio) expresan textualmente que “no será necesario disponer de un resultado de RT-PCR para COVID-19” para el parto o cesárea tras señalar que “aun con políticas de restricción de visitas, se permitirá la presencia de una persona sin infección, ni contacto estrecho, elegida por la gestante como acompañante, tomando en consideración que la persona sea mayor de edad, menor de 60 años y no posea enfermedades preexistentes” y recomendar para su asistencia “la realización de un exhaustivo triage antes del ingreso”.

Además aclara que “las recomendaciones para la persona gestante con sospecha y/o con confirmación de covid-19 no difieren de las indicadas para la población adulta, siendo imprescindible sostener las medidas de aislamiento y bioseguridad en todas las etapas de la atención”.

En esta línea, la definición de caso sospechoso del Ministerio de Salud de Nación indica que cualquier persona debe ser hisopada para coronavirus en el marco de la pandemia, sólo cuando presenta dos o más síntomas de la enfermedad (fiebre, tos, dificultad para respirar, vómito, diarrea, cefalea y falta de olfato o gusto). De lo contrario, no está recomendado. Y la última actualización del 1° de agosto señala que las personas gestantes deben ser hisopadas cuando cumplen con el criterio clínico epidemiológico que es “todo contacto estrecho conviviente con un caso de covid-19 confirmado por laboratorio, que cumpla con la definición de caso sospechoso vigente, en áreas con transmisión comunitaria”.