En los primeros meses de gestión de La Libertad Avanza, cuando empezaron a hacerse públicas algunas divergencias internas en la administración, donde muchas derivaron en la salida de funcionarios, Manuel Adorni dijo una frase que hace al discurso institucional del Gobierno: “En algunos temas opinamos diferente y está muy bien que así sea, no somos una manada”. Ese proceso se manifestó primero con la salida de Guillermo Ferraro del eliminado Ministerio de Infraestructura y prosiguió con más de 50 personas que dejaron de pertenecer a la nueva fuerza que llegó al poder el 10 de diciembre del año pasado.
Mientras en público se intenta naturalizar esa sucesión de hechos, puertas adentro de Casa Rosada la posición es absolutamente diferente. Una cosa dice el vocero formal de Javier Milei y otra los portavoces informales del denominado “círculo de hierro” integrado por el presidente, su hermana Karina Milei y el asesor Santiago Caputo. “Acá no hay transversalidad ni espacio para librepensadores porque esto no es una alianza de gobierno”, clarifican desde uno de los principales despachos de Balcarce 50.
Más allá de las especulaciones, rumores y operaciones, la ida de Mario Russo de la cartera de Salud va en línea con esa lógica. En el seno del poder libertario existe un comando centralizado que marca y baja los lineamientos. Quienes no suscriben a ellos están invitados a retirarse o directamente son expulsados, tal el caso del ex jefe de Gabinete Nicolás Posse, entre otros. Obviamente que la llegada a ese ministerio estratégico del Dr. Mario Lugones, al que Sandra Pettovello trató de no tener bajo su égida debido a lo complejo de su manejo, genera suspicacias, ya que el médico que estuvo a cargo del Sanatorio Güemes es padre de Rodrigo Lugones, socio en la consultora Move Group del principal consejero presidencial. Tanto eso, como la posibilidad de que esta trama tuviera que ver con las denuncias que hizo el Papa Francisco sobre el pedido de coimas que un jefe ministerial habría hecho a un inversor extranjero, fueron desestimadas por Adorni, que reiteró el libreto del comunicado oficial: el saliente Ruso se fue “por cuestiones estrictamente personales”, e invitó a la prensa acreditada en Balcarce 50 a que, en todo caso, las razones particulares se las consulten a él.
Al igual que el portavoz del Poder Ejecutivo, el mismo informante señaló que “la caída en la imagen de la gestión no va a mover el amperímetro del rumbo ni de lo que estamos haciendo”. En referencia a los datos de pobreza que publicó el INDEC, que alcanzaron el 52,9% (25 millones de personas) y 18,1 de indigentes (8,5 millones de habitantes), el dirigente con despacho en Rosada reforzó la respuesta del oficialismo y expresó que “pensar que el desastre que nos dejaron después de más de 20 años de populismo se resuelve en diez meses es una fantasía. Obviamente que el kirchnerismo va usar todo número negativo adjudicándoselo al gobierno, pero ¿alguien los escuchó hacerse cargo de algo?”, interrogó el interlocutor, dando por finalizada la charla con este diario.
Tarifas y salarios
Con este escenario de confrontación social de fondo y una baja del 12,3% en el consumo (según datos oficiales), el Palacio de Hacienda estudia aplazar los próximos incrementos en materia de tarifas. En ese marco, El Litoral le preguntó al vocero Adorni qué le dice el Gobierno al ciudadano que no llega a fin de mes porque ya no puede cubrir los aumentos en el transporte, medicamentos, luz, gas, y entre otras cosas, los productos de la canasta básica de alimentos, que para una familia tipo ya está al borde del millón de pesos si no alquila.
El funcionario respondió que “nadie dijo que iba a ser un proceso sencillo; nadie dijo que la actividad no iba a sufrir y nadie dijo que el salario no iba a sufrir porque veníamos de un proceso donde nos dejaron implantadas un montón de bombas que tuvimos que ir desactivando, y partes de esas bombas iban a afectar la actividad y también a los salarios reales”, y agregó: “El intermensual del EMAE (Estimador Mensual de Actividad Económica) empieza a mostrar signos de recuperación, y claramente es un proceso que estamos haciendo todo lo posible para que sea lo más veloz que se pueda, pero somos conscientes de lo que ocurre y tenemos un plan que está diseñado con una precisión de relojería para que lo que vos estás describiendo no ocurra más y mejore lo más rápido posible”.
En líneas generales, los responsables de la agenda presidencial se desentendieron de la visita –con salida al balcón- de la conductora televisiva Susana Giménez con el propósito de grabar un reportaje con Milei el mismo día -y a la misma hora- en que se hicieron públicos los alarmantes guarismos de pobres que tiene el país. El propio jefe de Gabinete, Guillermo Francos, evadió el tema al decir que la entrevista “fue pautada con anterioridad al anuncio del índice de pobreza”.
Evitando las diatribas que se imponían en las redes sociales, por entender que se buscó frivolizar una jornada adversa a la gestión, los factotums libertarios enfocaron su atención en la actividad que su jefe decidió encabezar el sábado en el Parque Lezama pre anunciando el lanzamiento nacional de La Libertad Avanza, aunque todavía falte que se otorgue la personería jurídica partidaria. Para los popes oficialistas se trata del primer acto de campaña del mileísmo de cara al desafío electoral que les propone el año que viene. Con ese propósito electoral, el presidente llamó a sus partidarios a no dispersarse y a ser leales para que “la casta política”, a la que llamó “el Partido del Estado” no le arruine “la vida a la gente de bien y que nada cambie”.
Con información de El Litoral