El coordinador de gabinete del Gobierno de la Ciudad, a través de un escrito desmintió la versión de la oposición de querer, «comprar la voluntad de los ediles a cambio de algo»
Cravero, en su aclaración sostiene, «La única negociación de esa noche fue que el ejecutivo aceptaba partir el aumento en dos meses (mayo y junio) y así se destrababan los votos de Rafael y Guirado acompañando la actualización de la UCM. Uberti y Fiore en principio no la iban a acompañar, pero no se iban a oponer. En teoría en esa reunión Rafael hablaba en nombre de Guirado también».
Aduciendo que, «Hablamos del ejemplo de la legislatura provincial, donde nosotros habíamos acompañado, entendiendo que Perotti necesitaba la actualización para gobernar. Por eso no entendía la postura de ellos con respecto al tema UCM.
Es cierto, que me solicitaron que empecemos a ejecutar las obras que estaban previstas en el presupuesto de este año para el concejo, por ejemplo, el techo que se llueve, la fachada que se estaba descascarando… También pidieron impresora porque no llegaban a comprarla».
Resumiendo que «Mi respuesta fue, que al no haber ellos actualizado la ucm en enero, donde habíamos tenido un aumento de 20% de sueldos y varios aumentos de nafta, al no haber cumplido provincia con el desembolso de obras menores para gastos corrientes en diciembre, el municipio estaba optimizando los recursos para garantizar sueldos y los servicios, porque los meses de enero, febrero y marzo son duros para la administración en el tema recaudación. Pero que ahora, que por fin la provincia nos había depositado los 6,5 millones podíamos arrancar con algunos arreglos, tal cual nos habíamos comprometido el año pasado».
Y sentenció, «Sólo una mente retorcida, inestable, falta de coherencia, compromiso y seriedad puede pensar que en esa reunión se intentó condicionar o negociar el voto de un concejal a cambio de algo»