Gobierno y gremios públicos siguen protagonizando un conflicto que prácticamente se encuentra en un punto de estancamiento. Nadie se mueve de su posición; los sindicatos insisten con el reclamo de adelantamiento de la reapertura de paritarias y el gobierno ratifica que sólo rediscutirá en septiembre, tal como estaba previsto.
Así, la provincia lleva dos semanas de paros de 48 horas y si la que se inicia no está atravesada también por medidas de fuerza, es porque los gremios la destinarán a deliberar para definir cómo profundizan sus planes de lucha. Tal como está dado el escenario, ésa pareciera ser la única variación en el conflicto; la intensidad de las medidas de fuerza que se retomarían la semana que viene
Este martes, de hecho, comenzarán los plenarios departamentales de AMSAFE, de cara a la asamblea provincial que fue convocada para el próximo jueves en esta ciudad. Allí y a partir de las cinco de la tarde, los docentes públicos decidirán los pasos a seguir. Rodrigo Alonso, titular del gremio, vaticinó que el conflicto podría agravarse ante la postura casi intransigente del gobierno de Omar Perotti, cuya última convocatoria al diálogo fue en mayo pasado. Asimismo, volvió a cuestionar otras decisiones que trascienden lo salarial, y que el Ministerio de Educación está adoptando de manera «unilateral». En ese plano mencionó la extensión de la jornada escolar en el nivel primario, y el sistema de aprendizaje continua (fin de la repitencia) de la secundaria.
La decisión que adopte la docencia pública será replicada también por la del sector privado. En tanto se espera que por estas horas tanto ATE como UPCN resuelvan, por su parte, las medidas a tomar.
Postura oficial
Desde el gobierno provincial, el ministro de Trabajo Juan Pusineri insistió en que se respetarán los acuerdos pactados, que prevén rediscutir salarios recién el mes que viene. «El gobierno va a respetar el esquema pactado oportunamente con los gremios que actúan en el marco de las paritarias; esto es cumplir con los dos incrementos previstos para agosto y septiembre, y realizar una nueva convocatoria en ese mismo mes», expresó. El funcionario aseguró que siguen «de cerca las decisiones que se van tomando en el orden nacional, particularmente las que se van desarrollando desde el Ministerio de Economía para tener un panorama lo más acabado posible». «En este momento – acotó-, nos encontramos en una situación de expectativa respecto de algunos indicadores como la inflación o el ingreso de divisas, en la idea de que empiecen a estabilizarse y que afecten lo menos posible la actividad económica, el empleo y las transferencias a las provincias». El ministro planteó que Santa Fe «gestiona insumos para que la producción siga funcionando; y para que la obra pública no se detenga porque, además, es una gran generadora de empleo. Y seguimos sosteniendo las políticas destinadas al consumo», completó.
Pusineri reconoció que también preocupa al gobierno la distribución de los recursos, pero advirtió que la provincia no sólo debe reunir fondos para pagar los sueldos. «El gobierno también tiene a cargo las prestaciones de la seguridad social -comentó-, es decir, las jubilaciones y pensiones que reciben los mismos incrementos que los activos. Además, atiende con costos crecientes todo lo que es salud, asistencia alimentaria, obras de infraestructura, políticas de estímulo al consumo como lo es el programa Billetera Santa Fe y el boleto educativo gratuito. Esperamos llegar en las mejores condiciones para el intercambio que vamos a iniciar en pocos días más», prometió.
El argumento de los gremios para insistir con el pedido de reapertura de paritarias radica en la escalada inflacionaria que ya dejó atrás los aumentos otorgados. Según datos oficiales, la suba de precios de julio fue del 7,4% mientras que la inflación acumulada en lo que va de 2022 ya supera el 46%. La mejora salarial que había acordado el gobierno de Omar Perotti en marzo totalizaba un 46% hasta septiembre. La inflación interanual, en tanto, ya se ubica por encima del 70%.