El Ministerio de Salud informó este lunes que hubo cuatro nuevas muertes y que se confirmaron 146 contagiados en el país en las últimas 24 horas. En total, la cantidad de infectados ascendió a 966.
Según el reporte oficial, fallecieron dos hombres de la provincia de Buenos Aires, de 67 y 58 años; una mujer de la provincia Tucumán de 77 años; y otra mujer de 68 años de la provincia de Neuquén. Los fallecidos hasta el momento suman un total de 24.
Por la tarde, Alberto Fernández dijo que «los primeros resultados parecen mostrar que estamos dominando al virus”.
Respecto a los casos positivos, el 50,6% son importados, el 25% son contactos estrechos de casos confirmados, y el resto se encuentra en investigación epidemiológica. Del total de casos el 42% son mujeres y el 58% son hombres. En tanto, las principales franjas etarias afectadas de los casos registrados corresponden a personas de entre 20 y 59 años, siendo la edad promedio de 43 años.
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires concentran cerca del 70% de los casos del país. Es por eso que uno de los principales focos de atención que tiene el gobierno nacional en este momento está puesto en el trabajo de aislamiento y contención que deben realizar en los municipios del conurbano y los barrios de la Capital Federal.
Además, el Ejecutivo también trabaja contrarreloj para multiplicar la cantidad de camas en terapia intensiva y de respiradores, y emprolijar la logística que implica llevar a cabo el operativo sanitario a nivel nacional que comenzó como consecuencia del avance del coronavirus.
Este domingo por la noche el presidente Alberto Fernández anunció la extensión de la cuarentena obligatoria hasta el fin de semana de Pascuas, es decir el domingo 12 de marzo. “Con esto vamos a lograr seguir controlando la transmisión del virus”, justificó.
El jefe de Estado explicó que de esta forma se logrará que “el ciclo de desarrollo del virus en el cuerpo se cumpla dos veces, así vamos a tener datos más claros de cómo se incuba la enfermedad”. “Es un largo camino, pero es una guerra contra un ejército invisible que nos ataca en lugares donde a veces no esperamos”, aseguró.
La decisión fue tomada tras una jornada en la que se reunió con expertos y con los gobernadores de las distintas provincias. “Un grupo de ocho expertos a los que habitualmente consulto me dieron su opinión de cómo evolucionaba la cuarentena y su idea de lo que deberíamos hacer”, expresó sobre cómo se gestó la prórroga del aislamiento social.
El objetivo de la Casa Rosada sigue siendo evitar que se aceleren los casos positivos porque de esa manera el sistema sanitario colapsaría. Pero la problemática social en el corazón del Gran Buenos Aires es otro de los termómetros que monitorean a diario. La continuidad del aislamiento no genera el mismo efecto en el conurbano que en la Ciudad.