El gobierno de Alejandra Dupouy afrontó su año electoral. Ya no queda nada para ir a buscar a las urnas, y llega el momento de aceitar la caja de cambios, y conquistar los kilometros que restan hasta el 2027.
Para que ese andar no tenga demasiados altibajos, deberá apuntalar la fortaleza de su gestión. Dupouy, mas allá del triunfo electoral, sabe internamente que algunas cosas deben pasar por el service. En el gabinete de secretarios, como en toda gestión, algunos muestran más solidez que otros. Eso genera que haya visiones más fuertes en el accionar, y otras parecen disiparse con mayor velocidad.
Terminado el proceso electoral 2025, comienza la segunda etapa, y será para buscar una buena clasificación hacia el 2027. Entre paredes, desde el gobierno, presumen que la Intendente pudiese considerar cambios, tal vez más profundos de los que algunos pretendan. Tambien, y es bueno aclararlo, el examen se rinde todos los días. No pasa siempre por una evaluación individual, si no colectiva. La gestión no solo pasa por mostrar el buen andar de una sola área, si no de todo el equipo. Hay ejemplos clarisimos, si hay mucha obra pública como lo hay, es innegable, esto no debería ser solo lo que imponga la fortaleza del gobierno, porque quedó claro que eso solo no alcanza. Debe haber un trabajo más firme de todo el resto. Es ahi donde hay dilaciones, tal vez no pensadas, pero si accidentales.
En el contexto dificil a la que serán sometidos los gobiernos locales en materia impositiva y económica, habrá que ser muy ingenioso para hacer mucho con poco. El fuerte respaldo de la gestión provincial por intermedio del senador Michlig, ayuda en ese andar, pero habrá que afinarlo para evitar vaivenes. En los meses venideros se anunciarán obras que serán claves para el futuro inmediato. Algunas llegarán terminadas para 2027, y el impacto social será importante. El programa de pavimento es otro cambio significativo para pretender mostrar obras tangibles. En una entrevista por streaming, la Intendente sostuvo que gran parte de toda esa obra que se hace para mejorar la transitabilidad hacia todas las escuelas, no devienen en una contribución de mejoras, ya que son provistas por el estado provincial. Por lo cual, el pavimento de muchas cuadras que se está concretando, no podrá cobrarse al frentista. Las obras por contribución de mejoras serán más escasas, y por ende el ingreso dinerario por el ellas, tambien será escaso. Incluso el aumento de la morosidad de obras ya inauguradas y que tenian a los vecinos como garantes para su pago, es muy alto. Si esa cobrabilidad no mejora será imposible avanzar con otras obras propias.
Pero, y acá el desafío, no todo deberá ser obras públicas. Aunque se sabe que en los próximos dos años, muchos pediran por mejorar su calidad habitacional, habrá que ser justo con el contexto. Los problemas que se suscitaron en materia de inseguridad obligaron a la mandataria a tener que reunirse con el ministro de seguridad provincial. Pidió por más efectivos policiales, algo que hace rato se reclama en silencio por parte de las fuerzas del orden. Asimismo, y más allá de casos que se dan como el robo al menudeo, o grescas, Ceres contempla uno de los menores registros de hechos graves en materia de seguridad. Otro ítem que la Intendente trasladó en una reunión ministerial es la salud. El Hospital local se ha convertido en el único efector de salud en muchos kilómetros. A Ceres vienen a atenderse pacientes de zona rural, otras localidades, y de pueblos santiagueños. Sobran enfermos, faltan recursos humanos. Faltan especialistas comprometidos con su profesión para asentarse en la ciudad, y convertirse en planta permanente. Los márgenes de error en la salud sabemos que no existen. El caso del menor de 1 año y 11 meses, que falleció en Rafaela, y que sus padres denuncian falta de precisión en su diagnostico médico, ha provocado un impacto negativo del hospital en el contexto social. El nosocomio fue duramente castigado en redes sociales, y medios de comunicación. El impacto del caso fue terrible. Este hecho tuvo a la Intendente trabajando para que se investigue el caso hasta las últimas consecuencias, porque sabe que no es bueno que esté agitada la sociedad con el tema salud, un tema muy sensible. Aunque no decide nada sobre el Hospital, y que esto depende de la provincia, la mandataria exigirá mejoras en los puntos que haya que mejorar. Un solo caso, como el ocurrido, tapa muchos otros que tal vez fueron bien diagnosticados por parte del mismo personal hospitalario.
El desafío politico de Dupouy se reinició minutos después de terminadas las elecciones a Concejales. Justamente el Concejo es otro punto que tiene criticas fuertes de la sociedad. Los ediles consideran que hay desconocimiento o confusión de una buena porción de la sociedad sobre el verdadero rol del cuerpo. Asimismo, habrá una busqueda de mejorar la comunicación para que el pulso de trabajo, permita a la sociedad saber que se trata puertas adentro de la casa legislativa. El Concejo no cambiara su estructura, porque el único cambio que se producirá será el de Mansilla por el de Busquets, ambos de la misma fuerza política. Las cuestiones a debatir tal vez puedan a llegar a ser más o menos importantes, que las que ya se abordaron. Esto dependerá de la impronta de la gestión, que siempre marca el ritmo del andar político local. En el gobierno esperan que desde las bancas de la oposición haya multiplicidad de criticas y pocas proposiciones. Algo que ha venido sucediendo en los últimos años, y que permitió un amplio desprestigio del Concejo en su totalidad.
No habrá reseteo, pero si aceitado de caja, para el andar hacia el 2027. De esto no hay dudas.
MARTIN FARIAS